Un centenar de alumnos han visitado hoy esta presa que embalsa 26 hectómetros cúbicos de agua  

La delegada ha visitado la presa La Consejería de Medio Ambiente celebra el Día Mundial del Agua con la realización de un conjunto de actividades entre las que destaca la organización, a través de la Agencia Andaluza del Agua, de unas jornadas de visitas guiadas a nueve grandes presas de Andalucía. Con esta iniciativa, la Junta pretende acercar el valioso patrimonio hidráulico de la Comunidad al ciudadano, divulgando, a su vez, las claves de la gestión hídrica en Andalucía.

Las visitas han sido concertadas previamente, en el caso de la jornada de hoy martes 22 de marzo, Día Mundial del Agua, y abiertas al público para el sábado 26 y domingo 27 de marzo. En el caso de Almería, las instalaciones elegidas han sido las de la presa de Benínar a la que hoy han acudido un centenar de alumnos de los Institutos de Enseñanza Secundaria de El Parador y Santo Domingo ( El Ejido). Durante la visita, a la que ha asistido la delegada provincial de la Consejería de Medio Ambiente, Sonia Rodríguez, se ha puesto de manifiesto la importancia de esta infraestructura construida en 1982 con la finalidad de actuar como defensa de avenidas de la vega y la población de Adra y la regulación de las aguas para utilizarlas en los riegos del Campo de Dalías.

Según ha señalado la delegada de Medio Ambiente, en la actualidad el volumen de agua embalsado en esta presa es de 26,05 Hectómetros cúbicos (42,0 % respecto a la capacidad total) y son las Comunidades de Regantes Sol Poniente y Sol y Arena las que se benefician directamente de esta agua, suministrándoles a estos regantes un caudal, en este momento, de 85.000 metros cúbicos al día; una cifra puede variar en función del agua acumulada en la presa y de las necesidades de los regantes.

A través de este programa de visitas, la Consejería de Medio Ambiente aproxima a la población a algunas de las más importantes obras hidráulicas construidas en Andalucía para mejorar las condiciones de vida de la población en armonía con el respeto al medio ambiente, explicando su papel en la gestión del agua, con funciones como la laminación de avenidas y su cometido como garante de disponibilidad de recursos hídricos contra las sequías, así como uso para regadío y otros aspectos históricos y culturales de las infraestructuras y su entorno paisajístico.

Benínar

La presa de Benínar se alza a unos 6 km aguas abajo de la confluencia de los ríos Yator y Alcolea, originarios del Grande de Adra, en la vertiente meridional de Sierra Nevada almeriense. Alimentan a dicho embalse las aguas de los torrentes, ramblas y barrancos que bajan por una abrupta orografía.

Las aportaciones superficiales medias son de 45 Hm³, manifestando una elevada torrencialidad, con grandes periodos de sequía y otros de fuertes avenidas, en un contexto local de marcado carácter semiárido. Desde aguas abajo de la presa, el río se encajona en un cañón profundo y labrado en materiales calizos, recibiendo las aguas de nuevo de barrancos y ramblas. Antes de desembocar en el Mediterráneo recibe los aportes de su último tributario, el río Chico, con el que conjuntamente se encargan de fertilizar la vega del delta del Adra.

El embalse de Benínar se plantea como una contribución parcial de la oferta de agua a los regadíos de los cultivos del Campo de Dalías. Estos regadíos se abastecen en gran medida de aguas subterráneas con grandes niveles de sobreexplotación. Las aguas superficiales de Benínar ofrecen una solución alternativa y complementaria que, en la medida de su disponibilidad anual, amortiguan esta situación. Por otra parte la presa juega un importante papel en la laminación de posibles avenidas que amenazan este territorio semiárido de lluvias torrenciales.