El próximo día 13 de junio, en Berja, Almería, el investigador y poeta pluridisciplinar Gustavo Vega Mansilla presentará su libro titulado Andalucía, poesía visual, en la Sala Molino del Perrillo, Biblioteca Municipal. Obra que presenta las diversas manifestaciones de la poesía visual vinculadas a Andalucía, tanto las habidas en el propio territorio andaluz como las que han desarrollado los autores andaluces en otros territorios. Esta obra nace de la tesis doctoral Poéticas de Creación Visual en España, 1970-1995, defendida por Gustavo Vega en la Universidad de Barcelona, reconocida con la máxima calificación en 2004 y el Premio Extraordinario de dicha universidad en el 2006.

El volumen cierra con un capítulo dedicado a Berja: Ciudad de la poesía. Donde cuenta los antecedentes históricos de esa vocación poética, hasta llegar a la Biblioteca Municipal “Miguel de Cervantes”, la que conocemos hoy, pilar fundamental en la promoción de la cultura en la localidad. Con su laboratorio de creación sin límites, el Taller POEX, de donde sale el Festival de Poesía Visual y el Centro de Poesía Visual. Un estudio realizado por Gustavo Vega que pone en valor todas esas actividades y que convierten al municipio en referente de la experimentación poética, pasando con este libro a la historia de la poesía visual andaluza.

En torno a la presentación del libro podremos ver una exposición de obras gráficas que fueron donadas por el autor cuando fue pregonero del VIII FESTPOVIBER.

Coincidiendo con esta presentación, se descubrirá una placa con el nombre de Sala Gustavo Vega Mansilla –poeta pluridisciplinar– en el Archivo de Poesía Visual de Berja (CPVB), espacio que le fue dedicado hace un año. Centro ubicado en la Casa de la Cultura.

La jornada concluirá en el Bosque de la poesía, Parque de la Alpujarra, donde Gustavo Vega Mansilla plantará un pino y leerá el siguiente poema:

El pino del bosque de los poetas

Hay un pino en el bosque de los poetas.

Símbolo de eternidad, de pasión en ascenso.

Su sombra inspira a quien se cerca,

como lo hacen los buenos versos.

Se alza el pino — vértice del sueño —

escribiendo en las páginas del viento.

Más que agua, bebe cielos,

nubes, pájaros… respira lento.

Sus ramas son versos en equilibrio,

cada aguja, un acento en silencio.

Verso vertical, poema incierto

clavado en las historias del tiempo.

Además, el pino plantado llevará el siguiente texto en una futura placa:

“Pino plantado en honor a la palabra poética.

Símbolo de eternidad, ascensión y fértil silencio.

Verso vertical, que te inspire su misterio

cada vez que lo veas”

Gustavo Vega Mansilla