Muchas familias esperan con urgencia una rehabilitación

Una de las mayores reivindicaciones de los ayuntamientos, la administración más cercana al ciudadano, es que se les

dote de mayor presupuesto para poder hacer frente a las necesidades de sus vecinos, ya que al derrumbe de las viviendas por las condiciones climatológicas se une por ejemplo la situación de crisis, que ha dejado a varias familias sin recursos y en la calle.

Esto ha hecho que en los municipios las viviendas municipales, que existen para paliar situaciones de urgencia, estén todas ocupadas. En otros casos hay numerosas viviendas que están esperando una rehabilitación y obras urgentes de reforma por parte por ejemplo de la Junta de Andalucía, como en el Cerro Matadero de Berja, donde decenas de casas están en el programa de infravivienda «pero no hay partida presupuestaria», según anuncia la edil de Bienestar social de Berja, Mª Luisa Cruz. En esta localidad la situación es muy «sangrante», desde Servicios Sociales tienen conocimiento de familias que viven incluso en una sola habitación por el mal estado del resto del inmueble, con humedades o con derrumbes. «Hay actuaciones en unas 30 viviendas, y muchas casas con problemas de humedades, con paredes de tierra y techos de madera que se han caído sobre todo en zonas como Cerro matadero, Cerrillo Pago, Cerro San Roque y algún caso en Benejí o Alcaudique», informa la edil. Muchas casas esperan el programa de rehabilitación «y lo más preocupante es que en todas viven familias con niños pequeños, que están sufriendo esta situación». En la calle Tomillo, por ejemplo, se cayó una pared de una vivienda donde vivía un matrimonio con dos hijos y Servicios Sociales les buscó un hogar. la situación se agrava porque el tiempo no da tregua y no da tiempo a secar las humedades ni techos. «Tenemos una familia, con cuatro hijos que en su casa conviven a diario con agua en el suelo. Desde el Ayuntamiento hacemos todo lo que podemos, pero faltan recursos y habría que poner en marcha con urgencia el plan de rehabilitación, que este año hemos visto que hace más falta que nunca», argumenta Cruz.