El Ayuntamiento de Berja se ha hecho cargo del acceso al barrio de San Roque, una vez firmada la correspondiente acta de cesión por Encarna Caparrós – delegada territorial de Fomento y Vivienda – y Antonio Torres, alcalde virgitano. La travesía era parte de la antigua carretera Berja-Turón, AL-461.
El tramo de 2.250 metros empieza en la calle Goya, esquina con Alférez, y acaba en la glorieta que conecta la carretera de Turón y la variante noroeste (A-1175 y A-1179). Gracias a la variante construida por la Junta de Andalucía, ya no hay que atravesar el centro de Berja para ir a Alcolea o Turón.
La sinuosa bajada tiene 6 metros de anchura media y en su primera mitad (calles Fuente de Toro y Velázquez) cuenta con red de aguas pluviales, que incluye 20 imbornales con rejilla en la margen izquierda y 12 en la derecha, así como una pequeña obra de fábrica (tajea) para paso de agua transversal.
El firme se halla en buen estado, con 6 pasos de cebra en áreas urbanas (desde la calle de los Cobos a Pozo Pago) y a partir de ahí líneas reflectantes en los márgenes. Además hay 49 señales verticales de circulación, así como árboles y arbustos (8 olivos centenarios, un pino, un naranjo, un granado…)
Por último, la cesión incluye a lo largo del tramo un par de sobreanchos de calzada y 5 parcelas contiguas, procedentes de expropiaciones, que suman 1.500 metros cuadrados.
La Junta realiza este tipo de cesiones a los municipios cuando las nuevas infraestructuras, con variantes de población, absorben el paso de la circulación en largo recorrido. De este modo, los antiguos tramos urbanos de carretera revierten su función al tránsito local y peatonal, permitiendo un diseño compatible con la calidad de vida.