No está en el baúl de los recuerdos. La carretera que une el municipio de Berja con el pantano de Benínar, casi en abandono por su mal estado tras las fuertes lluvias de hace ya casi tres años, sigue en los planes de la Junta de Andalucía. Así lo ha explicado la delegada de Fomento, Encarna Caparrós, a Diario de Almería. «Tenemos muy pendiente el arreglo de esta vía pero para la Junta existen una serie de prioridades y en este momento, por más que nos pese, hay carreteras en las que es primordial actuar».
Caparrós explica que la A-1175, una vía que también utilizan muchos vecinos del Poniente para viajar hasta Granada, no es una carretera principal con mucho tráfico «ya que está limitado al fin de semana y sobre todo para el uso de ciclistas» pero pese a ello insiste en que «tenemos en mente arreglarla porque es nuestra competencia pero los recursos son escasos y hay muchas prioridades».
Según los datos que se barajan desde la delegación de Fomento, la actuación en esta vía, que está dañada en al menos un tramo de 15 kilómetros en los que el asfalto brilla por su ausencia y hay desprendimientos, supondría una inversión de más de dos millones de euros con actuaciones en más de diez puntos. Además, como detalla la delegada, el adecentamiento definitivo de la carretera conllevaría también la puesta en marcha de expropiaciones a propietarios privados en varios tramos de la vía «lo que supondría un tiempo de actuación bastante considerable», a su juicio.
Una postura que choca diametralmente con la del alcalde de la localidad, Antonio Torres, que declaraba a este periódico hace unos días su «malestar» por la tardanza en el arreglo de la carretera. «Llevan ya tres años sin hacer nada y no será porque no hemos hablado con los distintos delegados de Obras Públicas pero siempre nos dicen los mismo: que no hay dinero y que tienen que buscar una partida económica de algún lado pero nunca la encuentran».
La preocupación del regidor va en aumento porque a su juicio esta situación de abandono «va a provocar que el día que vayan a arreglar la carretera, que actualmente parece en muchos tramos una vía romana, a la Junta de Andalucía le va a costar siete veces más de lo que le costaría actualmente acometer su arreglo».
Hay que recordar que los importantes desperfectos en esta vía de comunicación de la comarca del Poniente se produjeron en las Navidades de 2010 cuando tuvieron lugar unas fuertes lluvias. Desde ese momento la carretera está acordonada en varios tramos en los que solo hay un carril y hay señalización vertical que informa del estado de la vía.