L.MHay personas dependientes que no pueden disfrutar de un día de playa plenamente, ya que hay que cuidar muchos detalles, como el transporte adaptado, cuidados especiales de cara a las altas temperaturas o el tipo de comida y la hidratación.

Pero todos esos detalles los cuidaron a la perfección las 16 alumnas del taller de empleo ‘Adra ayuda’ II que en la actualidad están realizando prácticas en las residencias de mayores de Adra y Berja. «Se les ocurrió la idea de organizar una actividad en la playa, y tuvieron que organizarlo todo, desde el principio.

Además los mayores, en su jornada de convivencia en la costa abderitana, recibieron la visita de varios concejales del Equipo de Gobierno, como la edil de Presidencia, Carmen B. López, quien destacó «lo bien que se lo pasan los mayores con esta iniciativa para que pasasen un día de manera diferente a como desarrollan su día a día. Ha dado resultado y se han llegado a las conclusiones que teníamos previstas: los mayores han podido acercarse a la playa, incluso algunos se han mojado los pies y han podido disfrutar de un día de playa con los cuidados necesarios».
Jornada de convivencia
Fueron unas 30 personas de ambas residencias los beneficiarios de esta jornada, que tuvo lugar el pasado miércoles, entre las nueve y la una del mediodía, y en la que mayores como María o Antonio recordaron lo mucho que les gustaba ir a la playa «cuando éramos más jovencitos, menudas caminatas me daba pero ahora no puedo, me tienen que traer».
Y además de la visita a la playa, los mayores disfrutaron de un desayuno saludable a base de zumo y fruta en la jaima, donde además asistieron a un espectáculo de flamenco por dos bailaoras abderitanas. Y es que es un error pensar que un anciano se conforma con sentarse en un sillón y ver pasar la vida, en muchas ocasiones sólo necesitan un empujoncito, porque tienen muchas ganas de hacer cosas, aunque no puedan hacerlas solos porque su cuerpo ya no es el que era. Sólo había que ver la alegría de estos 30 mayores de Adra y Berja, dando palmas, cantando y bailando, para darse cuenta de sus ganas de vivir. Por eso, tal y como recalcaba el director de la escuela taller, Fernando Rodríguez, la principal función de los técnicos de atención sociosanitaria es «la preservación de la autonomía e independencia de los usuarios». Por ello, una actividad como esa excursión a la playa «lo que busca es normalizar en la medida de lo posible, y ajustándose a las posibilidades y habilidades de los usuarios, su vida».

Para el director, las alumnas están aprovechando muy bien el taller, que concluye en febrero de 2012. «El paquete básico de la formación teórica ya se ha dado y ahora estamos alternando periodos más cortos de información teórica con un itinerario de formación práctica en ocho centros diferentes para desarrollar capacidades necesarias para desarrollar su función. Harán prácticas en centros de estancias diurnas, empresas de ayuda a domicilio, residencias, etc.». En esta actividad «han tenido que organizar cuestiones como la movilidad, ya que han venido cuatro usuarios en sillas de ruedas y el propio taller de empleo ha alquilado un autobús adaptado. Lo que se ha tratado es de proporcionarles un entorno lo más normalizado posible». Vanesa, una de las alumnas, comentaba «lo gratificante» que estaba siendo la experiencia.
Para la edil de Presidencia «es muy satisfactorio que las alumnas vayan desarrollando su formación y nos gustaría que salgan bien preparadas profesionalmente para poder enmarcarse en el mercado laboral y encontrar un trabajo en este yacimiento».
La segunda edición del Taller de Empleo Adra Ayuda, se está desarrollando desde el pasado mes de febrero en Adra con la subvención del Fondo Social Europeo y el Servicio Andaluz de Empleo de la Junta de Andalucía. Además de formarse las 16 alumnas cobran un sueldo y con esta iniciativa se cumplen dos objetivos: formación e impulsar acciones que permitan garantizar el bienestar social a los abderitanos.