La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a siete años de prisión a un hombre de 34 años y vecino de Berja por violar en mayo de 2008 a su ex compañera sentimental, a quien abordó en su domicilio y golpeó para forzarle a mantener relaciones sexuales después de que esta se negase con rotundidad.

La sentencia de la Sección Tercera, a la que tuvo acceso Europa Press, le considera autor de un delito de agresión sexual tipificado en el artículo 179 del Código Penal aunque rebaja en un año la pena interesada por el fiscal. El tribunal le impone la prohibición de aproximarse a ella durante 15 años a menos de 200 metros y le obliga a abonar 9.120 euros por las lesiones y daños morales ocasionados a la mujer.

El acusado, de nacionalidad marroquí, se personó en la vivienda en la que residía la víctima, de quien había sido pareja durante «varios años» y al encontrar la puerta de acceso entornada entró y la cerró tras de sí para, a continuación, «manifestarle que quería mantener relaciones con ella».

Al rechazarle, ambos comenzaron un forcejeo durante el que la mujer arañó la cara al agresor y le rasgó el jersey pese a lo cual no pudo evitar que éste «le cogiese con fuerza, le pegase en el rostro para que se estuviese quieta y la echase sobre el colchón».

El tribunal apunta en los fundamentos de derecho de la sentencia a las declaraciones «persistentes y detalladas desde el inicio de la causa, sin cometer contradicción alguna» de la víctima frente al testimonio prestado por el acusado, quien negó en un primer momento el acto sexual para, después y ante la práctica de la prueba forense, admitirlo y decir que había sido «consentido y propiciado por ella».

Subraya, también, el informe médico que señala que las lesiones que sufrió la mujer, de las que tardó en curar una semana tras una primera asistencia facultativa, son «compatibles» con el ataque tal y como ella lo describió y no fruto de la supuesta riña que ambos mantuvieron por una discusión, tal y como alegó él durante la vista oral.

Fuente: Europa Press