Más de un año después de haber sido prometido el suministro de agua potable al barrio de Hirmes lo cierto es que aún no es una realidad y en sus calles todavía podemos ver como se sigue acarreando las garrafas y botellas desde la fuente hasta las casas para utilizarla en tareas tan básicas como el aseo personal y la limpieza.

El periódico el Adelanto de Berja en marzo del año 1936 titulaba una de sus noticias así: El agua en San Roque parece que será un hecho y son parte de las líneas de esa noticia las que podríamos trasladar 76 años después, cuestión tan importante que no debió nunca quedar abandonada, privando a dicho barrio del hermoso líquido, que le llevará alegría y limpieza.

La Delegación Provincial de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía otorgó la concesión de aguas superficiales al Ayuntamiento para el abastecimiento en junio de 2011, pero según personas cercanas al proyecto afirman que falta el permiso de la Agencia Andaluza del Agua, antigua Confederación, puesto que por sus terrenos discurrirá la tubería que llevará el agua hasta un depósito que se construirá en la parte superior del barrio.

El caudal que se extraerá es de 0,08 litros por segundo y se hará desde dos fuentes, ambas situadas en el barranco de Hirmes, en los terrenos expropiados para la construcción del embalse de Benínar. Una de esas fuentes es la conocida como ‘Pirondo’ que actualmente se encuentra en un estado de total abandono y de la que su limpieza y conservación depende de la Agencia Andaluza del Agua.