Antigua Almazara en BerjaA finales del año que viene se espera que entre en funcionamiento la primera almazara que se construye en Berja en muchos años, después de que en la segunda mitad del siglo pasado desapareciera prácticamente de la comarca la producción de aceite. Francisco Ruiz, un virgitano de 40 años, espera poder abrir en noviembre de 2011 esta fábrica de aceite que tiene previsto surtir su producto a toda la provincia almeriense y la costa granadina. «Aún no he decidido el tipo de embotellado ni la marca, pero pensamos empezar a funcionar en la próxima campaña», afirma Francisco Ruiz, promotor de un proyecto eminentemente familiar que ya ha sido aprobado en Pleno municipal y que cuenta con alguna ayuda de los fondos europeos para desarrollo rural.

 

Según recuerda Paco Ruiz, «a partir de los años 60 y 70 empezaron a perderse las almazaras en Berja, aunque todavía quedan en Alcolea o Laujar. La industrialización y la emigración a los invernaderos del Poniente acabaron con el trabajo en la aceituna. Mis padres tenían entonces almazaras y ahora mi esposa y yo hemos decidido recuperar esta industria.»

La nueva instalación estará ubicada en el Paraje del Cueto, si bien todavía no ha comenzado la construcción porque el promotor está a la espera de la licencia municipal de obras, siendo el aspecto burocrático de la obra lo que más quebraderos de cabeza está provocando a Francisco Ruiz, quien tiene muy claro el tipo de negocio que piensa promover, «comercializando el aceite en toda Almería y la costa granadina. Vamos a crear dos o tres puestos de trabajo y necesitaremos algún comercial que represente la marca. Hace ya dos o tres años que estamos trabajando en la iniciativa y esperamos en la próxima campaña comenzar la producción de unos 250.000 kilos de aceite al año, que obtendremos después de tratar un millón de kilos de aceitunas, según nuestros cálculos. Actualmente hay mucha aceituna por la zona, pero se tiene que llevar a almazaras de Alcolea o Laujar, porque en Berja no hay, así que vamos a abrir la primera después de muchos años», afirma Francisco Ruiz. «En cuanto me den la licencia de obras empezamos a funcionar», promete, deseoso de que la documentación municipal le llegue cuanto antes.

La inversión prevista asciende a unos 700.000 euros, que llegarían al millón de euros si se incluye el valor del solar, propiedad familiar, donde se va a levantar la fábrica. «Tengo la financiación, tengo las máquinas, tengo el solar y el equipo para trabajar, sólo espero que me llegue la licencia para comenzar los trabajos», reitera Paco Ruiz, que junto a su mujer comienza con la primera piedra a hacer realidad un sueño que empezó hace unos años cuando se decidieron a recuperar un oficio muy tradicional en la comarca anteriormente, como lo prueban los restos de antiguas almazaras existentes. Puede que sea uno de los aspectos positivos de la crisis económica que también ha afectado a los invernaderos almerienses, la comercialización de productos tradicionales de la zona, como el aceite y la aceituna, provocando la vuelta de industrias que en épocas pasadas fueron importantes en la economía provincial.

Ya en mayo de 2008 Francisco José Ruiz Ruiz inició el procedimiento de autorización de este proyecto de construcción de almazara y envasadora de aceite de oliva, por lo que hace mucho tiempo que lucha por sacar adelante la iniciativa. El proyecto y estudio de Impacto Ambiental se pudo examinar durante el plazo legal de treinta días hábiles en la delegación provincial de Medio Ambiente de Almería, esperándose actualmente que se publique en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).

Fuente: El Almeria