Hay ciertos nombres que se convierten en parte de nuestra vida sin que nos demos cuenta. Porque desde pequeños, nos van acompañando, tanto en el colegio como en casa y en cada paso que damos, desde la universidad hasta la oficina. Por eso, son tantos los años que están a nuestro lado, que con solo verlas, o pronunciarlas, nos provocan una especie de nostalgia: Stabilo es uno de esos nombres.

¿Quién no ha tenido alguna vez un subrayador Stabilo en la mochila? ¿O ha escrito mil veces con un bolígrafo de tinta fina que no falla nunca, aunque hayan pasado varios años? Hoy vamos a hablar de esta marca que tiene una historia apasionante y un lugar asegurado en el corazón (y el escritorio) de millones de personas.

Un poco de historia

Tal y como acabamos de mencionar, los productos Stabilo llevan toda la vida con nosotros. Pero hay que decir que la marca como tal nace en Alemania en 1925, aunque como fábrica de lápices se remonta aún más atrás, al siglo XIX. Por lo que sí, ha visto crecer a muchas generaciones pero siempre ha sabido estar a la altura: evolucionar, reinventarse y adaptarse a los tiempos. Stabilo no solo fabrica bolígrafos o rotuladores sino que le da vida a las ideas o a las emociones pero también a los conocimientos y como no, a la creatividad. 

El fenómeno Stabilo Boss: el subrayador que lo cambió todo

Hablar de Stabilo y no mencionar el Stabilo Boss Original sería casi un crimen. Este producto se lanzó en 1971 y era un subrayador fluorescente que se convirtió en todo un icono de la papelería. ¿Por qué? Porque contaba con una forma plana, una amplia gama de colores vibrantes (y ahora también pastel), y como no, por su durabilidad. Todas estas cualidades han hecho que siga siendo, décadas después, el subrayador más vendido del mundo. ¿Su éxito? No solo ha sido por el color, sino por su comodidad de uso, ya que su diseño es totalmente ergonómico y su tinta dura más de lo que pensamos. Incluso si lo dejas destapado durante un buen rato, sigue funcionando como si nada. Algo que los estudiantes agradecen mucho cuando están inmersos en apuntes eternos.

Más allá del subrayador: los otros bolígrafos que merecen nuestra atención

Los bolis Stabilo tampoco se quedan atrás. Desde el Stabilo Paintball, con diseño clásico hasta el Point 88 con colores surtidos. Ya que estamos ante una amplia gama de opciones que debes tener en cuenta, más allá del subrayador por excelencia. 

Stabilo Pointball

El bolígrafo Pointball 0,5 mm es uno de los bolígrafos que debes tener en cuenta. Más que nada porque dispone de un diseño clásico y único, que está fabricado en un 79% por plásticos reciclados. Además, su tinta de aceite es de lo más suave para una escritura rápida. Ahora solo tienes que elegir el color, porque tienes varias opciones disponibles.

Stabilo Point 88

Este bolígrafo de punta fina (0.4 mm) es otro clásico. Lo reconoces por sus rayas blancas sobre el naranja. Los puedes usar para muchos fines pero es perfecto para tomar apuntes en limpio o para hacer esquemas visuales perfectos. Además, tiene una variedad de colores impresionante.

Stabilo Pen 68

En este caso estamos ante una versión más gruesa y potente que el Point 88. Podemos decir de ellos que son ideales para colorear o para hacer lettering, así como dibujos, o lo que tú quieras. La tinta es intensa, cubre muy bien y es resistente al agua. Además, tiene una amplia gama de colores.

Stabilo EASYoriginal

Es una de las mejores opciones para los más pequeños de la casa, que están empezando a escribir. Son totalmente ergonómicos y además, hay la versión tanto para diestros como para zurdos, dejándonos una escritura más sencilla y fluida.

Stabilo y la creatividad: una relación inseparable

No es casualidad que muchísimos artistas o diseñadores, usen Stabilo para darle vida a sus creaciones. La marca ha sabido posicionarse también en ese terreno más artístico, ofreciendo herramientas versátiles que sirven tanto para hacer bocetos rápidos como para desarrollar proyectos más complicados. Sin ir más lejos, también en las redes sociales nos encontramos con publicaciones donde los bolígrafos Stabilo tienen su protagonismo. Esto hace que la marca conecte también con las nuevas generaciones. Pero, ¿Por qué gustan tanto los Stabilo? Podríamos dar un sinfín de razones entre las que destacaremos su calidad así como los colores tan variados y como no, su diseño. Claro que no nos podemos olvidar de su compromiso con la sostenibilidad. Algo sumamente importante hoy y siempre, y que la empresa ha tenido en cuenta para poder reducir su huella ecológica.

Aunque además de todo esto, se le une tanto la funcionalidad como la personalidad. Ya que, no solo son un medio de escritura sino también parte de nuestro día a día y de dónde vayamos. 

No subestimes el poder de un buen bolígrafo

Es cierto que en un mundo cada vez más digital, escribir a mano puede dejarse en un segundo plano. Pero nunca debemos dejar de lado el tomar apuntes, subrayar un libro, garabatear ideas o escribir una carta, porque todo ello nos sigue definiendo. Por eso, hacerlo con un bolígrafo que responde bien, que fluye, que te gusta, hará que sientas todo de otra manera.

Stabilo ha sabido acompañarnos en esos pequeños y grandes momentos de nuestra vida. Desde un examen importante hasta una tarde de lluvia pintando mandalas, o bien, desde una nota rápida hasta un diario personal lleno de pensamientos y reflexiones. Por eso, cuando ves un Stabilo en tu escritorio, no estás viendo solo un bolígrafo: estás viendo una herramienta de expresión. Algo que realmente es de lo más poderoso y que no tiene que caer en el olvido.