Los alcaldes almerienses cuyos municipios se ven afectados por la suspensión temporal de planes urbanos en primera línea de playa no están nada de acuerdo con el decreto-ley aprobado el pasado martes por la Junta y que ayer publicaba el BOJA.
En concreto, los regidores de Cuevas del Almanzora, Níjar, Berja, Carboneras, Pulpí, Mojácar y Adra han rechazado la nueva norma, que deja paralizados sus planes urbanísticos, junto a los de los municipios de Garrucha, Enix, Vera y Almería, hasta que se adapten al Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA). No les afecta, por contra, a los Consistorios de El Ejido y Roquetas de Mar, que se habían adaptado por completo al polémico POTA.
Si bien la Junta considera que con esa suspensión se pone orden y se protege aún más el litoral en los primeros 500 metros de costa – se limitará en esa franja la construcción de viviendas y establecimientos hoteleros -, los alcaldes consultados por LA VOZ DE ALMERÍA afirman que se trata de una «interferencia en toda regla» en competencias municipales y se «perjudica gravemente» a los propietarios de terrenos en primera línea de playa.
Las opiniones son coincidentes entre los regidores, adscritos al Partido Popular y a la formación independiente Gicar de Carboneras, que también ven el decreto-ley de la Junta como una «afrenta» a la nueva Ley de Costas aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy. Ha discrepado también el presidente de la Federación Andaluza de Urbanizadores, Ricardo Arranz.
Por el contrario, las opiniones favorables han llegado desde el PSOE, IU y ecologistas.